En una votación histórica, el Congreso aprobó el proyecto de ley de financiación del Departamento de Seguridad Nacional con una victoria de 257 a 167 el martes por la tarde, lo que amplificó todas las especulaciones sobre el cierre del DHS. El proyecto de ley se enviará al presidente Obama para su firma. Estipula un gasto de $ 40 mil millones que no descarrilará las acciones ejecutivas de Obama sobre inmigración. La votación marca una gran victoria para los demócratas, que han estado exigiendo que el Congreso apruebe un proyecto de ley «limpio» para financiar al DHS sin ninguna norma de inmigración.
Mientras que los partidarios del proyecto de ley están encantados con la noticia, los de línea dura de inmigración están enojados porque el proyecto de ley no contiene disposiciones para prohibir la financiación para ejecutar las órdenes ejecutivas de Obama. La orden ejecutiva protegerá a unos 4 millones de inmigrantes indocumentados de la deportación. La Cámara aprobó un proyecto de ley a mediados de enero que habría desactivado esas órdenes, lo que también permite que ciertos inmigrantes indocumentados soliciten permisos de trabajo.